01-07-2022

Banca Comunal

En 1984, John Hatch vio que la falta de capital mantenía pobres a los agricultores bolivianos pobres. Los préstamos tradicionales eran demasiado grandes y caros, y sin garantías, los agricultores no podían pedir prestado. Así que se le ocurrió una idea; si los agricultores formaban grupos para compartir un préstamo y garantizar el pago, podían acceder a los fondos que necesitaban para invertir en sus operaciones agrícolas. Y así nació Village Banking, y con él llegó el amanecer de lo que hoy conocemos como microfinanzas.

La idea resultó versátil y revolucionaria.

Los “bancos comunales”, grupos de empresarios de bajos ingresos que se reúnen para compartir y garantizar los préstamos de los demás, se convirtieron en motores de desarrollo.

En áreas urbanas y rurales, y en economías tan diversas como la Ciudad de Guatemala y Kitunda, Tanzania, los Bancos Comunales permitieron que aquellos con escasos recursos tomaran prestado, invirtieran y hicieran crecer sus negocios. También permitieron que las mujeres, a quienes habitualmente se les negaba el crédito, construyeran empresas que mantuvieran comida en sus mesas y a sus hijos en la escuela.

Hoy en día, muchas de nuestras filiales en todo el mundo todavía ofrecen este servicio. Los vecinos se reúnen en grupos de Village Banking ™. Las personas toman prestado capital de trabajo para sus microempresas y el grupo garantiza esos préstamos. Village Banking ™ también anima a los vecinos a apoyarse unos a otros mientras hacen crecer sus negocios; estos grupos de apoyo mutuo pueden ayudar a vigorizar comunidades enteras.

Manteniéndose fiel a su idea original, FINCA se ha convertido en una red mundial de instituciones microfinancieras seguras y sostenibles que ayudan a las familias de bajos ingresos a crear empleos, generar activos y mejorar su nivel de vida.